Primavera

Se acabaron los tiempos oscuros, ha llegado la primavera y es momento de dar paseos por la montaña y coger espárragos, el deporte oficial de Oset durante el mes de marzo. Y no es empresa fácil porque lo que importa no es coger más cantidad sino los que están más inaccesibles aunque para eso tengas que cruzar barrancos, escalar paredes y acabar con las manos llenas de espinas. Luego ves pasar a algún oriundo con la bolsa llena pero tu te llenas de orgullo porque él no ha pasado por donde tú. aunque comerá mas que tú...

Aparte de las espinas me traigo de recuerdo un par de rascones en el codo y la rodilla, tipicas marcas de los veranos de 12 años cuando no acababas de montar en bici y ya habias caído. Pues eso mismo me ha pasado este fin de semana aunque lo mio tiene delito porque las dos veces que caí lo hice parado... y es que las zapatillas estas que han inventado ahora las carga el diablo y cuando quieres sacar el pie el pedal te atrapa y tu irremediablemente te quedas con cara de gilipollas viendote caer lentamente hacia el costado. Pero no pasa nada... porque es primavera y está todo verde, porque ha salido el sol y hemos vuelto a usar la oscuridad para dormir.