La aventura comenzó el jueves cuando nos despertamos en un estudio rodeado de pinos alejados de toda población, sin nada que comer... mochila vacía al hombro y al pueblo a comprar, vamos en busca de comida y de un par de bicis para movernos por allí.
Lo encontramos todo pero nos toca hacer 7 kilometros cargados a las espaldas de algo de pasta, verduras, preparados para pasta, agua y cerveza... ah bueno y un par de doradas y una botella de vino blanco jijiji
El jueves no da para más, por la tarde descansar, pasear y dormir. El viernes primera excursión al faro de la Mola, nos quedamos en el camino por las empinadas cuestas pero disfrutamos de la vuelta por la playa y su viento...
Sábado es dia de dar la vuelta por s'estany pudent y el domingo amanece lloviendo y con mucho viento parece que la excursión al faro de Lucia y el sexo se va a perder... lástima... pero allá a la una aparece el sol y despues de una siesta decicidimos ir allá, 30 kilometros mas de bici pero ha valido la pena.
Y el lunes para olvidar, 7 kilometros de camino al puerto en bici con mochila y guitarra incluida con un viento que nos tumababa, un viaje hasta Ibiza que las montañas rusas se quedaban atrás y cuando llegamos allí nos espera la noticia de que nuestro barco se retrasará hasta las 12 de la noche cuando saliamos a las 4... nada que hacer, tapear, ver Ibiza con una mochila a la espalda, entrar en un cine a ver una pelicula para olvidar y llegar a las 12 y darte cuenta que aun no se sabe cuando saldrá el barco. Y salir a las 3 de la mañana llegar a Valencia a las 7, subir a casa, ducharte, tomar un desayuno completo y salir a trabajar... Y desear durante todo el día una gran cama... Y llegas a casa despues de comprar a las 8 y dormir, y dormir, y dormir... hasta el dia siguiente.
Y entonces despertar y olvidar todo lo que has pasado para volver y recordar, los pinos, la tranquilidad, el viento en tu cara, el olor a mar, los caminos en bicicleta y Formentera.
Alicia
