lunes, junio 13, 2011

La Maratón - Mamova 2011

Hace ya dos meses que pasó la maratón de montaña y no he contado nada. El facebook ha hecho mucho daño a los blogs personales creo que debería de volver a los orígenes y dejar de lado tanto cotilleo.
La carrera empezó en la aldea de La Pobleta, cerca de Andilla, con frío, mucho frío. Los que allí habían dormido decían que habian estado a cero grados.
Son casi cerca de las 9 esta vez ni caliento, los primeros 5 kilometros ya calentaré. Por delante esperan 42 kilometros aunque la idea es llegar al 30 y ver que pasa.

Empieza la carrera, no es como las carreras cortas en las que todo el mundo sale nervioso y rápido, aqui no, vamos todos más tranquilos porque sabemos lo que queda por delante.



Los primeros 7 kilómetros son un sube baja suave, el terreno es conocido y el pulsómetro va marcando el paso, a partir del 8 empieza la primera subida buena, subimos por una senda desde los 800mt a los 1200mt, todos en fila india y andando, nadie se le ocurre correr.

Llegamos a la cima, ahora toca bajar, por delante unos 10 kilometros de bajada camino de la media maraton. Llego a Andilla, me paro, como, como mucho, bebo más y vuelvo a arrancar, toca subir y subir hasta el km 27, 6 kilometros de subida dura de nuevo hasta los 1200 metros. La nueva cima es Peñaparda, quien vigila la aldea de Osset desde lo más alto. Justo llegando a la cima me empieza a dar calambres en las piernas. Mierda, pienso... Bajo el ritmo y me tomo el abrupto descenso con mucha calma.
Y llego a Osset, km 30, objetivo inicial, llevo 4 horas y media de carrera y decido seguir, paro, saludo a la familia que me está animando en la plaza, entro en casa, me tomo un aquarius, agua, de todo un poco y adelante!! que sólo quedan 12!!

Sigo bajando hasta Artaj (km 33) y empieza la última subida, la más dura, por el calor, por el cansancio, por el muro del km 36...


Ahora ya sólo queda llegar a meta, no hay vuelta atrás, medio caminando, medio corriendo, estirando cuando entran rampas,...

En el kilometro 40 entra una alegría inmensa porque es el momento en el que sabes que vas a llegar y que lo vas a conseguir, voy corriendo solo por el monte y no puedo evitar emocionarme y aún me entran más ganas de correr pero las piernas no están ya para mucho.

Km42, Entrada de nuevo en la Pobleta donde hacía 6 horas y 2 minutos que había comenzado aquella aventura, giro al final de la calle y allí está la meta.